expr:class='"loading" + data:blog.mobileClass'>

¡Hora de vacaciones!

miércoles, 27 de julio de 2016

Llevo días dándole vueltas a  la idea de si cerrar o no cerrar por vacaciones, pero en los últimos días he sufrido cambios en mi vida laboral, cambios buenos, muy buenos, al menos cambios que se que mentalmente me van a ayudar y por eso he decidido partir de cero.

Como ya os adelantaba, Llámamemamá está en proceso de transformación y os adelanto que hoy mismo he podido ver cómo va la cosa y estoy ¡Encantada con el resultado! El cambio es de 360 grados. Es un cambio físico, más organizado y más profesional. Creo que os lo merecéis y merecéis que esto vaya mejorando día a día. Cuento con la ayuda de un gran profesional que cuando llegue el momento os presentaré.
No va a perder la esencia dulce, y sobre todo la temática, aunque aparecerán nuevas secciones que confío os gusten tanto como a mi. Guardo una pequeña sorpresa, que espero y deseo salga bien y podáis verla en septiembre. ¡El niño se hace mayor!

Siempre lo he dicho, mi año 'fiscal' comienza en septiembre. Digamos que se avecinan grandes acontecimientos en ese mes y además es un punto de inflexión para hacer repaso del 'curso' anterior. Lo aprendido. Hay que dejar atrás lo malo y sonreír a lo que está por venir.

Creo que es el momento de iniciar esta andadura y además estoy convencida de que contaré con vuestro apoyo. Pero... ¡Hasta aquí puedo leer! Que me emociono y al final termino por contaros todo y hasta enseñaros los primeros bocetos.

De cualquier manera, no olvidéis escribirme si queréis proponer temas, si deseáis que vuestro parto sea protagonista de algún jueves (por supuesto los partos seguirán vivitos y coleando) Si queréis contactar conmigo, estoy a vuestra entera disposición en llamamemama@gmail.com y como ya sabéis, podéis encontrarme en Redes Sociales.

Prometo estar activa al cien por cien y apuesto por Facebook e Instagram (@llamamemamaoficial) para poneros al día y mostraros todo aquello que llame mi atención. También prometo desconectar de vez en cuando y disfrutar al máximo de cada segundo con mis Manueles & family.

Sólo quería desearos un muy muy muy feliz verano, y que os espero a todos y cada uno de vosotros el próximo....¿Septiembre? (No dejéis de seguirme para saber el día en el que el nuevo Llámamemamá, volverá)

Love y muy feliz jueves!


Una semana sin él

miércoles, 20 de julio de 2016

¿Sabéis eso de que no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes? Pues bien, en ese punto estamos Papá Manuel y yo. 

'Disfrutad de vuestro tiempo' 'Descansad' 'Aprovechad a dormir' llevo exactamente una semana escuchando una y otra vez frases parecidas.

Hace siete días que los geniales abuelos se fueron al pueblo con mi Petit Manuel. Él estaba emocionadísimo. Quiso hacer su maleta, metió un poco de todo y no durmió deseando que llegase el momento de ir al tan famoso: Pueblo. 

Reconozco esa sensación de deseo cada verano. Mis abuelos nos esperaban a mis primos y a mi para pasar tres inolvidables meses. No había muchas normas, lo pasábamos en grande y por supuesto, jamás de los jamases queríamos volver a la capital.

Pero ayyyy ahora. Ahora que soy yo la madre, la perspectiva cambia por completo. 

Empezaré confesando que me he convertido en una madre histérica que whatsappea y llama sin parar a cada hora para ver qué tal está su cachorro. Huelga decir que el cachorro en cuestión no quiere ponerse al teléfono porque está living la vida loca en el pueblo.

Estos días nuestro ánimo ha decaído. Tanto Papá Manuel como yo nos sentimos inmensamente vacíos. Llegar a casa y que no esté. Sus risas, sus llantos, sus payasadas. Creo que esta vez lo estamos viviendo más intensamente porque nos falta él.

Y lo notamos. Nos sentimos incapaces de disfrutar al 100%. Cada cosa que hacemos le recordamos. Entrar en su habitación nos angustia, porque no está.

Contado así, cualquiera diría que hace apenas tres meses pasábamos diez días por EE.UU  en pareja. Pero es que es cierto, cada día le añoramos más. Está siendo difícil y de verdad que lo notamos en nuestro estado anímico.

Ahora es cuando nos estamos dando cuenta de que ya es imposible mirar atrás e intentar recordar nuestra vida sin él. Poco a poco cada día les quieres mas, les conoces mas y por supuesto tu vida se centra en ellos.

Está pasándoselo bomba. Piscina, parque, abuelos, él está feliz. Yo también de saber que están siendo unas buenas vacaciones, pero le necesito. Necesito sus abrazos y sus besos y su olor y su cariño.

No se si alguna vez habréis vivido lo mismo que yo estoy viviendo, pero de ser así entenderéis mi angustia y mi desazón. Cuento los días, los minutos y los segundos para tenerle entre mis brazos. Mientras, soy feliz sabiendo que él también lo es, disfrutando de su Pueblo.

    Foto: Llámamemamá



Su alimentación, nuestra responsabilidad

jueves, 14 de julio de 2016

Hace unos días leía en un periódico digital una noticia que cuanto menos suscitaba preocupación.
Ocurría en Italia. Una niña de dos años fue hospitalizada en gravísimas condiciones por falta de Vitamina B12. Aquí os dejo el link  para que le echéis un vistazo vosotros mismos.


El caso es muy grave. En los últimos tiempos están proliferando modas alimenticias que sin darnos apenas cuenta pueden suponer un peligro para nuestra salud, y más aún para nuestros pequeños.

Creo que el tema es mucho más serio de lo que parece y creo que hay una mezcla de culto al cuerpo y modas extrañas. Respeto cualquier creencia, ya sea religiosa, naturista o simplemente forma de alimentarse, pero en el momento en el que ponemos en riesgo la vida de un menor, debemos empezar a pensar qué es lo que está pasando.

Para explicar de manera mas gráfica la importancia de una alimentación sana y completa comenzaremos por saber qué nos aporta la Vitamina B12.

Hay que partir de la base de que dicha vitamina tiene origen animal. Las carnes, los huevos y los productos lácteos son los máximos proveedores, así como el atún, las almejas o las sardinas. El salmón es uno de los pescados con más Vitamina B12.

Es conocido que gran cantidad de personajes famosos adquieren Vitamina B12 como suplemento, e incluso se lo suministran vía intravenosa.

¿Qué nos aporta la Vitamina B12?

Es beneficioso para el desarrollo del cerebro y del sistema nervioso, el crecimiento celular y la división celular. Ayuda a la formación de glóbulos rojos y la conservación de un sistema inmunológico fuerte. Previene el cansancio y la sensación de agotamiento.

¿Qué consecuencias puede tener estar falto de B12?

Las consecuencias más graves son anemia y gran debilidad de la membrana protectora del cerebro y de los nervios de la médula espinal. ¿Cómo os quedáis?

Pero también es fundamental conocer en qué se basa la alimentación vegana. 

Primero debemos saberse existen diferencias entre la alimentación vegetariana y la vegana. Los vegetarianos rechazan alimentos de origen animal, pero los veganos, además, rechazan todos los derivados tales como lácteos, miel...

Las legumbres y verduras son básicos en una alimentación libre de alimentos de origen animal.

Las personas que siguen una alimentación vegetariana necesitan complementos vitamínicos que suplan las carencias de los nutrientes que aportan las carnes y los pescados. Siempre llevando un control médico que certifique que pese a no consumir productos de origen animal existen unas buenas condiciones de salud.

Los niños, y en especial los bebes, durante los primeros años de vida necesitan estar a tope de vitaminas y con todas las necesidades físicas y de salud cubiertas. En el caso de las familias vegetarianas, los pediatras deben llevar un control estricto y regular del correcto crecimiento y de la nutrición del pequeño para evitar precisamente enfermedades que deriven de la falta de vitaminas, tal y como ha ocurrido en el caso de la niña italiana.

Los niños no tienen la capacidad de decidir si quieren comer o no carne, ni entienden con dos años las razones de por qué no ingieren productos de origen animal. Los niños simplemente son niños, y por tanto, los padres somos los únicos responsables de que su desarrollo sea el correcto al margen de nuestros pensamientos, porque más vale prevenir que curar, ¿No creéis?
   Foto: Google.es

El civismo español (ironía pura y dura)

miércoles, 6 de julio de 2016

Lo he dicho cientos y cientos de veces, la educación de nuestros hijos comienza en casa. Nos guste o no, los padres somos cien por cien responsables de muchas de las conductas de nuestros hijos.

Y pensaréis...¿Y esta charleta improvisada a qué es debido? Pues bien, íbamos el domingo pasado dando un paseo con Papá Manuel, Petit Manuel, una servidora y la moto (una mas en la familia ya).
Íbamos dirección a un parque que alberga una inmensa fuente, que incluso tiene un puente y que es perfecto para disfrutar, cuando me pareció ver una silueta esbelta en el interior de la fuente.

Deslicé las gafas de sol hasta la punta de mi nariz y enseguida conduje la mirada hacia aquella fuente. Por favor, dime que lo que veo no es un señor, por favor, dímelo. 

Pero mis peores pronósticos se cumplieron, y conforme nos acercábamos, la cosa empeoraba. Un hombre gordito y peludo, se estaba dando un chapuzón (literal) junto a cuatro niños (supuse que eran familia) e incluso lo hacía con una tabla de surf.

He de decir que no hice fotos porque aparecían menores y porque hasta reconozco, me dio vergüenza ajena aquella imagen. 
Pero no contenta, pude ver boquiabierta que mas de una familia repetía el baño en la fuente pública.

Vale, quizá haya dado una imagen de viejoven aburrida, pero os prometo que jamás animaría a mi hijo a bañarse en una fuente, y menos a meterme con él. Pero, creo que nadie se ha parado a pensar qué pasaría si todos lo hiciésemos (Estamos en nuestro derecho, claro está)

Os puedo asegurar que no era la única que miraba patidifusa aquella escena dantesca. ¡Es que además el agua estaba verde!

Entonces pensaba en los valores que cada familia inculca a sus hijos. Si no somos capaces de respetar un espacio público, ¿Qué podemos esperar? ¿Respeto por los demás? Creo que no.

En nuestros países vecinos, especialmente en los nórdicos, los ciudadanos son conscientes de la necesidad de cuidar lo propio, pero también lo ajeno.

Sin ir más lejos, el otro día en un programa de televisión, que en España conoceréis, Madrileños por el Mundo, aparecía Gales. La protagonista contaba como la gente sacaba a las puertas de su casa cosas para vender, comida, y dejaban un bote (sin controlar obviamente) para que cada uno, cívicamente dejase el dinero de la compra.

La reportera, atónita, decía: 'Esto en España sería impensable' y estaba claro. En España no dejaríamos ni el cartel con los productos en venta. Es nuestra mentalidad y tenemos que asumirlo pero, ¿Por qué no tratamos de cambiarlo? ¿Será tan complicado?

Ya se que contado así parezco demasiado radical pero es que es tal y como lo siento y lo pienso.

Pedimos respeto por los animales, por las personas, por la naturaleza, pero nos olvidamos de pedir respeto por las cosas.

Me fui con una sensación extraña. Eran libres de hacer lo que les diese la gana, nadie decía nada, como siempre todos callados, normalizando una situación que para nada creo que fuese la correcta.

Lo peor de todo es que luego nos llevamos las manos a la cabeza con el vandalismo callejero, con la falta de cordura en la juventud, pero no nos damos cuenta que el civismo y el ejemplo a seguir somos nosotros, los padres.


Foto:Emaze.com

Commons Attribution 4.0 International license.

Commons Attribution 4.0 International license.
Proudly designed by Mlekoshi playground