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Vuelta al cole: Cómo sobrevivir sin morir en el intento

viernes, 11 de septiembre de 2020

No miento si digo que apenas recuerdo la última vez que me senté a escribir. A escribir en el blog, por supuesto, porque lo que se dice escribir escribir, lo hago todos los días.

Juré y perjuré que mínimo una vez al mes tenía que sentarme y continuar aquello que había empezado. Pero los que sois padres sabréis que eso de ponerse objetivos y cumplirlos es un mito, y más si se requiere tiempo, espacio y silencio (fundamentalmente esto último).

Pues bien, comienza la ansiada, esperada y merecida (sobre todo para los padres y abuelos) vuelta al cole.

No voy a repetirme con aquello que oímos una y otra vez y que ya comienza a ser pesado: 'Es una vuelta atípica', 'esto no va a durar hasta octubre' 'confinarán las clases'.... y un largo etcétera de predicciones, suposiciones, intuiciones que sólo llevan al desánimo.

Quizá porque por fin es viernes y me siento positiva, pero me niego a pensar así. 

He visto a mis hijos felices, contentos  en la vuelta al cole por ver a sus amigos después de más de seis meses, protegidos, aleccionados (quinientas veces al día repito eso de: ¡súbete la mascarilla!) pero precavidos. No sé si habrá o no confinamiento (esperemos que no) pero creo que se merecían esa dosis extra de socialización.

La tablet, el móvil o la videoconsola han formado parte de la vida diaria de mis hijos estos últimos meses, porque cuando teletrabajas, te encargas de los deberes, de sus cuidados, de la casa, tienes que sobrevivir, es más, DEBES sobrevivir. Y tengo la inmensa suerte de contar con mi madre que ha sido quien me ha dado y me sigue dando ese soplo de aire por seguir cuidando de la pequeña, pero ¿qué hacía con el mayor?

Un confinamiento complicado para todos

Reconozco haberme sentido mal en más de una ocasión e implorar al cielo que por favor llegase septiembre porque necesitaba estar sola, necesitaba no tener cien mil cosas en la cabeza y además pensar que mi hijo de seis años se estaba convirtiendo, por mi culpa, en un adicto a la tecnología.

No es broma lo que digo. Así lo he sentido. De hecho, quizá muchas de vosotras y vosotros sabréis a lo que me refiero, pero he sufrido ansiedad, mucha ansiedad. Hasta hace unos meses no sabía qué era eso y ahora me encuentro inmersa en un proceso de asimilar, de relativizar y de intentar no ver más allá de lo que está pasando ahora.

Petite Adriana tampoco lo ha puesto demasiado fácil. Tiene mucho carácter y necesitaba retomar esos hábitos, esa rutina, esas obligaciones. Creo que para ella empezar el colegio también ha supuesto un chute de energía.

Así que, aunque no lo creáis y esta semana de vuelta al cole haya sido un poco caótica de preparativos, me siento aliviada, me siento bien, me siento más tranquila. 

Lo hablaba con distintas mamás...¡necesitamos recuperar nuestras vidas! y quizá lo que me está pasando es que empiezo a ver la luz al final del túnel. Eso no significa que no tenga miedo ¡OJO!, significa que pasito a pasito vamos retomando aquello que forma parte de nuestro día a día. El respeto a este bicho no debemos perderlo nunca, pero tenemos que intentar seguir de la mejor manera posible

Seguridad en los colegios

Siendo totalmente sincera, no tenía muchas esperanzas en las medidas de seguridad de los coles. Todo se había hecho tarde y siendo septiembre, los padres recibíamos la información con cuentagotas. Sin embargo, al menos en el cole de mis hijos se han puesto las pilas, he visto cosas que me han sorprendido para bien.
Mucha seguridad, muchas normas, mucha concienciación, sólo pido que esto no cambie con el paso de los días, que nadie se relaje, que todo el esfuerzo puesto para una vuelta al cole segura se convierta en un día a día seguro. No se si habrá algún caso o no, porque no soy la 'bruja Lola', pero desde luego, no me cabe duda alguna que se está haciendo todo lo posible por evitarlo.

Aulas digitales

Algo fundamental para mi que trabajo en el mundo digital es que los colegios estén más y mejor preparados de lo que estaban en marzo, digitalmente hablando. Hablo siempre desde mi experiencia, pero si nos volviesen a confinar es necesario, imprescindible diría yo, el contacto diario con los profes, las tutorías, las explicaciones... Los padres NO SOMOS PROFES

Una de las situaciones que más ansiedad me creaba era intentar explicar algún ejercicio a mi hijo y recibir la respuesta : 'Así no es', 'tu no sabes', 'la profe nos los explica mejor'... Que a todo esto te dan ganas de decirle, '¡Pues claro hijo, es que yo soy periodista, no profesora'. En fín, seguro que sabéis perfectamente de qué os hablo.

En marzo no había tiempo, pero de eso han pasado seis meses, debemos estar preparados. Además, el mundo digital es el futuro para ellos, ¿por qué no aprovecharlo?

De no escribir, a echar una buena charla. Hoy estaba inspirada :) 

Llamamemamistas, no prometo nada que no pueda cumplir, pero si sigo mi propósito...¡tendréis noticias mías muy pronto!

¡Feliz vuelta al cole!


¿Cómo salir de tu zona de confort? Llámamemamá está de vuelta

domingo, 7 de julio de 2019

Llevo tiempo escuchando: 'Irene, tienes dejado el blog' 'Irene, no tires por tierra todo lo que has hecho durante cinco años', y es verdad.
Cuando empecé mi master el tiempo se redujo demasiado y lo que menos me apetecía era llegar a casa y encender de nuevo un ordenador.
Luego la migración a Wordpress. Comencé a hacerla, pero me estanqué, quería que fuese perfecta, tenía muchas cosas en mi cabeza, pero de nuevo la falta de tiempo me la jugó.

Trabajo, niños, casa, master, TFM, viaje por EEUU y Canadá y un alocado pero reconfortante cambio de trabajo terminaron por dejarme totalmente OUT.

¡Sal de tu zona de confort! Y eso hice.

Así que decidí paralizar todo y centrarme. No podía vivir deprisa y corriendo, porque por muchas ideas que tuviese en mi cabeza era imposible llevarlas a cabo y que saliesen como esperaba.

Ser madre, estudiar y trabajar fuera y dentro de casa no es fácil. Seguramente muchas y muchos que hayáis pasado por algo parecido me entenderéis.
Meses después, puedo confirmar que todo ha merecido la pena, pero que ha sido duro, más de lo que esperaba. El blog ocupaba mi mente, lo prometo, pero era inviable. Daba dos pasos adelante y uno atrás y sentía que debía continuar pero a veces no tenía ganas y ese precisamente era el punto al que no quería llegar.

Pero poco a poco parece todo encauzado y me siento super feliz. Muchos de vosotros sabéis que pese a ser periodista llevaba mas de una década dedicada al mundo financiero. ¿Os podéis creer que en menos de dos meses he conseguido resetear diez años de trabajo y formación?  A veces lo cuento y no termino de creérmelo. ¿Serían las inmensas ganas que tenía de salir de allí? ¿O simplemente el hacer algo que me gusta y me llena? Quizá un todo de sensaciones.

Me levanto cada mañana motivada. Me siento afortunada, valorada y echaba demasiado de menos esa sensación de equipo, de sentir que tu opinión o idea cuentan y que están dispuestos a escucharte.

Desde aquí hago un llamamiento a todos los jefes del mundo mundial. Es necesario que escuchéis a vuestra gente, es imprescindible sentirse útil y sobre todo, hay que intentar ser justos.
Recuerdo llegar a la oficina, pasar mi 'jefa' (jefa entre comillas por llevarlo implícito en el sueldo, que no por ejercer como tal) por delante y ni un buenos días, ni un hasta mañana... Hoy por hoy puedo decir que por suerte no todo el mundo es igual. Existen buenas personas, existe sensación de equipo y eso es lo que añade valor a tu trabajo.

He vuelto a escribir, tengo ganas de escribir. No es que haya olvidado los números, ¿O si? pero ahora siento que estoy donde debo de estar. He tardado, pero lo he conseguido.

Con esto quiero animaros a salir de vuestra zona de confort. Cuesta, pero se puede. A veces toca renunciar a cosas pero ganas muchas mas, os lo aseguro.

Y pienso continuar con Llámamemamá. Quizá de momento paralice la migración, pero seguiré publicando y seguiré dando guerra en redes sociales. No voy a poner un día fijo ni unos post fijos al mes porque no quiero prometer algo que no pueda cumplir, pero he vuelto para quedarme. Así que si no me seguís...¿A qué esperáis?

                                          Llámamemamá vuelve a escribir


                               

NAVIDAD CON NIÑOS+BALANCE 2018+PROPOSITOS 2019+ RETOS PROFESIONALES

lunes, 31 de diciembre de 2018

                        



Acaba 2018 y como siempre...¡Toca hacer balance del año que termina! ¿Tenéis en mente nuevos propósitos para el 2019? ¡Yo si! ¿Queréis saber lo que espero de este año impar que me encanta? ¡Pasen y vean! ¡Feliz año llamamemamistas!

Nuevos productos de #Bebenube

jueves, 22 de noviembre de 2018

Ya sabes que hace meses que colaboro con Bebenube, ¿Aún no sabes quienes son? Pues te cuento.

He de reconocer que siempre he sido bastante dejada para eso de los productos Bio y demás pero os prometo que desde que estoy probando sus cajitas me he aficionado. Algunos, han llegado a casa para quedarse.

Bebenube es un equipo muy muy guay que se preocupa de hacer llegar a nuestras casas productos friendly con nuestros bebés. Además, colaboran con la Fundación Trébol para integrar laboralmente a personas con discapacidad intelectual, y eso, es muy TOP. Se encargan de preparar las cajitas con todo el amor del mundo mundial, y es algo que me encanta.

¡Al lío! Qué feliz me puse cuando vi que este mes entraban los Cereales con frutas de la marca Hipp. Precisamente les conocí con Bebenube y no han salido de casa. Me encantan (su olor es muy...mmmm) y a Petit Adriana también.




Otra marca que desconocía pero que nos ha conquistado es Kueshi Baby. ¡Me vuelve loca! La textura de sus productos es lo más, muy muy cremosa y nada empalagosa. Su olor cítrico inunda mi baño y permanece en el cuerpo y pelo de mis pequeños. 100% recomendable.





Little Star, una pelota súper suave, aterciopelada que desde luego se que encontraré por casa mas de una vez. Y es que #Petitmanuel y #Petiteadriana se lo pasan de lo lindo jugando juntos.


Cuddlings Plasters, es la segunda vez que llegan a casa estas tiritas tan molonas. Aunque espero no tener que utilizarlas en exceso, lo cierto es que alguna vez que otra nos han sido de gran ayuda.


Ya comenté que una marca que estaba redescubriendo (porque en realidad ya había oido hablar de ella) es Nüby. Tienes cositas tan chulas como este aro mordedor. Aun no se lo he dado a #Petitadriana  porque quería esperar a enseñároslo pero según termine el post ¡allá que voy !


Sabéis que no soy de esas mamis que devoran revistas de embarazos, bebés y demás, pero reconozco que en mi sofá siempre trato de que haya alguna revista chula para, de vez en cuando, echarles un vistacillo. Así que desde que Bebenube me envía la revista CRECER se ha convertido en un 'must' de nuestra vida.


Y por supuesto, no podía dejar de dar las gracias a SARA, la encargada de hacerme llegar todas estas cositas bonitas preparadas con mucho amor



Tú ya eres un llamamemamistas en potencia, eso significa que tienes un 50% de descuento en tu suscripción a Bebenube, ¿Aquí esperas? ¡Pruébalo y comparte tu experiencia!
¡Feliz jueves!




¡Hora de vacaciones!

miércoles, 27 de julio de 2016

Llevo días dándole vueltas a  la idea de si cerrar o no cerrar por vacaciones, pero en los últimos días he sufrido cambios en mi vida laboral, cambios buenos, muy buenos, al menos cambios que se que mentalmente me van a ayudar y por eso he decidido partir de cero.

Como ya os adelantaba, Llámamemamá está en proceso de transformación y os adelanto que hoy mismo he podido ver cómo va la cosa y estoy ¡Encantada con el resultado! El cambio es de 360 grados. Es un cambio físico, más organizado y más profesional. Creo que os lo merecéis y merecéis que esto vaya mejorando día a día. Cuento con la ayuda de un gran profesional que cuando llegue el momento os presentaré.
No va a perder la esencia dulce, y sobre todo la temática, aunque aparecerán nuevas secciones que confío os gusten tanto como a mi. Guardo una pequeña sorpresa, que espero y deseo salga bien y podáis verla en septiembre. ¡El niño se hace mayor!

Siempre lo he dicho, mi año 'fiscal' comienza en septiembre. Digamos que se avecinan grandes acontecimientos en ese mes y además es un punto de inflexión para hacer repaso del 'curso' anterior. Lo aprendido. Hay que dejar atrás lo malo y sonreír a lo que está por venir.

Creo que es el momento de iniciar esta andadura y además estoy convencida de que contaré con vuestro apoyo. Pero... ¡Hasta aquí puedo leer! Que me emociono y al final termino por contaros todo y hasta enseñaros los primeros bocetos.

De cualquier manera, no olvidéis escribirme si queréis proponer temas, si deseáis que vuestro parto sea protagonista de algún jueves (por supuesto los partos seguirán vivitos y coleando) Si queréis contactar conmigo, estoy a vuestra entera disposición en llamamemama@gmail.com y como ya sabéis, podéis encontrarme en Redes Sociales.

Prometo estar activa al cien por cien y apuesto por Facebook e Instagram (@llamamemamaoficial) para poneros al día y mostraros todo aquello que llame mi atención. También prometo desconectar de vez en cuando y disfrutar al máximo de cada segundo con mis Manueles & family.

Sólo quería desearos un muy muy muy feliz verano, y que os espero a todos y cada uno de vosotros el próximo....¿Septiembre? (No dejéis de seguirme para saber el día en el que el nuevo Llámamemamá, volverá)

Love y muy feliz jueves!


Una semana sin él

miércoles, 20 de julio de 2016

¿Sabéis eso de que no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes? Pues bien, en ese punto estamos Papá Manuel y yo. 

'Disfrutad de vuestro tiempo' 'Descansad' 'Aprovechad a dormir' llevo exactamente una semana escuchando una y otra vez frases parecidas.

Hace siete días que los geniales abuelos se fueron al pueblo con mi Petit Manuel. Él estaba emocionadísimo. Quiso hacer su maleta, metió un poco de todo y no durmió deseando que llegase el momento de ir al tan famoso: Pueblo. 

Reconozco esa sensación de deseo cada verano. Mis abuelos nos esperaban a mis primos y a mi para pasar tres inolvidables meses. No había muchas normas, lo pasábamos en grande y por supuesto, jamás de los jamases queríamos volver a la capital.

Pero ayyyy ahora. Ahora que soy yo la madre, la perspectiva cambia por completo. 

Empezaré confesando que me he convertido en una madre histérica que whatsappea y llama sin parar a cada hora para ver qué tal está su cachorro. Huelga decir que el cachorro en cuestión no quiere ponerse al teléfono porque está living la vida loca en el pueblo.

Estos días nuestro ánimo ha decaído. Tanto Papá Manuel como yo nos sentimos inmensamente vacíos. Llegar a casa y que no esté. Sus risas, sus llantos, sus payasadas. Creo que esta vez lo estamos viviendo más intensamente porque nos falta él.

Y lo notamos. Nos sentimos incapaces de disfrutar al 100%. Cada cosa que hacemos le recordamos. Entrar en su habitación nos angustia, porque no está.

Contado así, cualquiera diría que hace apenas tres meses pasábamos diez días por EE.UU  en pareja. Pero es que es cierto, cada día le añoramos más. Está siendo difícil y de verdad que lo notamos en nuestro estado anímico.

Ahora es cuando nos estamos dando cuenta de que ya es imposible mirar atrás e intentar recordar nuestra vida sin él. Poco a poco cada día les quieres mas, les conoces mas y por supuesto tu vida se centra en ellos.

Está pasándoselo bomba. Piscina, parque, abuelos, él está feliz. Yo también de saber que están siendo unas buenas vacaciones, pero le necesito. Necesito sus abrazos y sus besos y su olor y su cariño.

No se si alguna vez habréis vivido lo mismo que yo estoy viviendo, pero de ser así entenderéis mi angustia y mi desazón. Cuento los días, los minutos y los segundos para tenerle entre mis brazos. Mientras, soy feliz sabiendo que él también lo es, disfrutando de su Pueblo.

    Foto: Llámamemamá



Su alimentación, nuestra responsabilidad

jueves, 14 de julio de 2016

Hace unos días leía en un periódico digital una noticia que cuanto menos suscitaba preocupación.
Ocurría en Italia. Una niña de dos años fue hospitalizada en gravísimas condiciones por falta de Vitamina B12. Aquí os dejo el link  para que le echéis un vistazo vosotros mismos.


El caso es muy grave. En los últimos tiempos están proliferando modas alimenticias que sin darnos apenas cuenta pueden suponer un peligro para nuestra salud, y más aún para nuestros pequeños.

Creo que el tema es mucho más serio de lo que parece y creo que hay una mezcla de culto al cuerpo y modas extrañas. Respeto cualquier creencia, ya sea religiosa, naturista o simplemente forma de alimentarse, pero en el momento en el que ponemos en riesgo la vida de un menor, debemos empezar a pensar qué es lo que está pasando.

Para explicar de manera mas gráfica la importancia de una alimentación sana y completa comenzaremos por saber qué nos aporta la Vitamina B12.

Hay que partir de la base de que dicha vitamina tiene origen animal. Las carnes, los huevos y los productos lácteos son los máximos proveedores, así como el atún, las almejas o las sardinas. El salmón es uno de los pescados con más Vitamina B12.

Es conocido que gran cantidad de personajes famosos adquieren Vitamina B12 como suplemento, e incluso se lo suministran vía intravenosa.

¿Qué nos aporta la Vitamina B12?

Es beneficioso para el desarrollo del cerebro y del sistema nervioso, el crecimiento celular y la división celular. Ayuda a la formación de glóbulos rojos y la conservación de un sistema inmunológico fuerte. Previene el cansancio y la sensación de agotamiento.

¿Qué consecuencias puede tener estar falto de B12?

Las consecuencias más graves son anemia y gran debilidad de la membrana protectora del cerebro y de los nervios de la médula espinal. ¿Cómo os quedáis?

Pero también es fundamental conocer en qué se basa la alimentación vegana. 

Primero debemos saberse existen diferencias entre la alimentación vegetariana y la vegana. Los vegetarianos rechazan alimentos de origen animal, pero los veganos, además, rechazan todos los derivados tales como lácteos, miel...

Las legumbres y verduras son básicos en una alimentación libre de alimentos de origen animal.

Las personas que siguen una alimentación vegetariana necesitan complementos vitamínicos que suplan las carencias de los nutrientes que aportan las carnes y los pescados. Siempre llevando un control médico que certifique que pese a no consumir productos de origen animal existen unas buenas condiciones de salud.

Los niños, y en especial los bebes, durante los primeros años de vida necesitan estar a tope de vitaminas y con todas las necesidades físicas y de salud cubiertas. En el caso de las familias vegetarianas, los pediatras deben llevar un control estricto y regular del correcto crecimiento y de la nutrición del pequeño para evitar precisamente enfermedades que deriven de la falta de vitaminas, tal y como ha ocurrido en el caso de la niña italiana.

Los niños no tienen la capacidad de decidir si quieren comer o no carne, ni entienden con dos años las razones de por qué no ingieren productos de origen animal. Los niños simplemente son niños, y por tanto, los padres somos los únicos responsables de que su desarrollo sea el correcto al margen de nuestros pensamientos, porque más vale prevenir que curar, ¿No creéis?
   Foto: Google.es

El civismo español (ironía pura y dura)

miércoles, 6 de julio de 2016

Lo he dicho cientos y cientos de veces, la educación de nuestros hijos comienza en casa. Nos guste o no, los padres somos cien por cien responsables de muchas de las conductas de nuestros hijos.

Y pensaréis...¿Y esta charleta improvisada a qué es debido? Pues bien, íbamos el domingo pasado dando un paseo con Papá Manuel, Petit Manuel, una servidora y la moto (una mas en la familia ya).
Íbamos dirección a un parque que alberga una inmensa fuente, que incluso tiene un puente y que es perfecto para disfrutar, cuando me pareció ver una silueta esbelta en el interior de la fuente.

Deslicé las gafas de sol hasta la punta de mi nariz y enseguida conduje la mirada hacia aquella fuente. Por favor, dime que lo que veo no es un señor, por favor, dímelo. 

Pero mis peores pronósticos se cumplieron, y conforme nos acercábamos, la cosa empeoraba. Un hombre gordito y peludo, se estaba dando un chapuzón (literal) junto a cuatro niños (supuse que eran familia) e incluso lo hacía con una tabla de surf.

He de decir que no hice fotos porque aparecían menores y porque hasta reconozco, me dio vergüenza ajena aquella imagen. 
Pero no contenta, pude ver boquiabierta que mas de una familia repetía el baño en la fuente pública.

Vale, quizá haya dado una imagen de viejoven aburrida, pero os prometo que jamás animaría a mi hijo a bañarse en una fuente, y menos a meterme con él. Pero, creo que nadie se ha parado a pensar qué pasaría si todos lo hiciésemos (Estamos en nuestro derecho, claro está)

Os puedo asegurar que no era la única que miraba patidifusa aquella escena dantesca. ¡Es que además el agua estaba verde!

Entonces pensaba en los valores que cada familia inculca a sus hijos. Si no somos capaces de respetar un espacio público, ¿Qué podemos esperar? ¿Respeto por los demás? Creo que no.

En nuestros países vecinos, especialmente en los nórdicos, los ciudadanos son conscientes de la necesidad de cuidar lo propio, pero también lo ajeno.

Sin ir más lejos, el otro día en un programa de televisión, que en España conoceréis, Madrileños por el Mundo, aparecía Gales. La protagonista contaba como la gente sacaba a las puertas de su casa cosas para vender, comida, y dejaban un bote (sin controlar obviamente) para que cada uno, cívicamente dejase el dinero de la compra.

La reportera, atónita, decía: 'Esto en España sería impensable' y estaba claro. En España no dejaríamos ni el cartel con los productos en venta. Es nuestra mentalidad y tenemos que asumirlo pero, ¿Por qué no tratamos de cambiarlo? ¿Será tan complicado?

Ya se que contado así parezco demasiado radical pero es que es tal y como lo siento y lo pienso.

Pedimos respeto por los animales, por las personas, por la naturaleza, pero nos olvidamos de pedir respeto por las cosas.

Me fui con una sensación extraña. Eran libres de hacer lo que les diese la gana, nadie decía nada, como siempre todos callados, normalizando una situación que para nada creo que fuese la correcta.

Lo peor de todo es que luego nos llevamos las manos a la cabeza con el vandalismo callejero, con la falta de cordura en la juventud, pero no nos damos cuenta que el civismo y el ejemplo a seguir somos nosotros, los padres.


Foto:Emaze.com

La bonita locura de llamarse mamá

miércoles, 8 de junio de 2016

No se que está pasando este 2016 pero está siendo un año repleto de buenas nuevas. La cigüeña creo que está llamando a las puertas de muchas casas y me siento muy pero que muy emocionada porque alguna que otra me pilla cerca ( y no es la mía, no penséis ☺️)

El caso es que me encantan estas noticias y compartirlas es genial. Sin embargo, la maternidad no siempre es un camino de rosas, y todo ello me ha llevado a recopilar aquellas cosas que echo de menos, que han cambiado, que me sacan de mis casillas (frase madre in mi madre), en definitiva la cara B de tener un hijo.

1. El número uno, sin duda alguna, y ganando por goleada...(trrrrrrrrrr.....) la falta de sueño. Nunca he sido de dormir hasta las mil, y por eso pensé que no me afectaría tanto, pero reconozco que para mi ha sido el cambio mas duro. Petit Manuel estuvo tomando pecho hasta los ocho meses, así que podéis imaginaros lo que dormía. A veces me recostaba en su cuna, apoyada en la barandilla y lloraba agotada sabiendo que en pocas horas sonaría el despertador para ir a trabajar.
Algunas veces me hago la remolona, pero no cuela. Todo el mundo me decía...'tranquila Irene, esto al año se pasa...' No recuerdo quien me lo aseguraba, pero si me acordase le díria cuatro cositas... :)
No estoy a favor ni en contra del colecho, pero tanto mi marido como yo teníamos claro que no pretendíamos hacerlo...Pues bien, como todo en esta vida...llevamos dos años que noche si y noche también, termina durmiendo con nosotros.

2. El segundo punto que añoro es comer o cenar tranquila. Ahora todo se resume en querer comer lo que mamá tenga en el plato, subirse a mi espalda mientras trato de beber agua sin atragantarme para hacer el caballito...Todo un espectáculo diario...¡Pasen y vean!

3. Hace poco intentábamos tomar algo con unos amigos en una terraza. Misión imposible. Mi cerveza se calentó, no lograba coincidir con mi marido en la mesa. Intenté recurrir a algo básico y vital en la vida de cualquier madre o padre al bordedeunataquedenervios, Youtube, pero nada. Mi hijo se había propuesto no dejarnos tranquilos, y nuestros amigos y futuros papás, nos miraban asustadillos (lógico y normal) ante aquella situación.

4. Ir tranquila a una tienda. Si, señores. Por mas que lo intento he llegado a la conclusión de que es IMPOSIBLE ir a una tienda con mi hijo. Lo primero quiere montarse en un carro y...¡Madre como no haya carro! Le compramos una silla, un pastizal de silla de paseo que ha usado...¿Dos veces? Si la sacamos se empeña en 'conducirla' él, así que ya podéis haceros una idea de la que monta atropellando a toda buena persona que se cruza en su camino. 

5. ¿He dicho dormir?

6. Poder ver algo distinto en la televisión que no sea el Clan.

7. Muchas sabéis que yo no puedo correr porque tengo una minusvalía en las piernas, así que echo de menos no hacer el ridiculo intentado ir como loca detrás de mi pequeño. No corro, pero tampoco ando..,nueva modalidad olímpica sin duda.

Madre mía...visto así...son muchas cosas. Cosas, que pese a que las echo de menos, no cambiaría por nada del mundo mundial porque si, lo se, tengo un hijo travieso que cada día me recuerda la barriga de mas que tengo, que me pone de los nervios, que a veces agota mi paciencia, pero que me da besos como nadie, me dice lo guapa que estoy y lo happy que se siente. Me despierta por las mañanas dándome besos y llamándome MAMA (la palabra más increíble del mundo). Me paso el día pensando en él, en sus travesuras, en sus achuchones, en sus te quieros hasta la luna... 

A las futuras primeras mamás les diría que no es fácil, que lloraran y reirán a partes iguales, y que a veces echaran de menos cosas que han cambiado, pero que sin duda alguna, cada día tendrán la mejor recompensa esperando.

   Foto Google.es

El verano ya llegó

miércoles, 1 de junio de 2016

Madre mía, casi sin darnos cuenta nos hemos plantado en el verano. Bueno, los más puristas diréis que hasta el veintiuno no eeeentra... ¡Cierto! Pero ya huele a calorcito, a terracitas, a playa y sobre todo a ¡vacaciones!

Los días son más largos...(para los padres a veces demasiado) y pronto los pequeños dicen adiós al cole para disfrutar de un merecido descanso.

Y ahora, ¿Qué hacemos? En mi caso diré ¡benditos abuelos! Admiro a la gente que los tiene lejos y hacen triquiñuelas para apañárselas. Yo sin ellos no serrín nada. 
El caso es que, como es lógico y normal, muchas personas tienen que buscar campamentos, ludotecas, guarderías que les suplan las horas laborales para poder 'compaginar' (que no conciliar) la vida personal y laboral.

Ahora la oferta educativa es excesivamente amplia y tenemos un gran abanico de posibilidades (previo pago eso sí) pero, ¿Qué opción es la mejor?

Os he seleccionado alguna de ellas para ayudaros en la elección.

CAMPAMENTOS DE INGLES: Aquí podemos volvernos locos porque son los más demandados con diferencia y también los que más variedad disponen.

La empresa Talking point se encarga de la organización y coordinación de campamentos multiaventura donde el principal atractivo es la posibilidad de aprender inglés de una forma divertida y sana.

El campamento Talking Point se diferencia por la reducción de alumnado de entre 7 y 17 años. Los profesores son nativos y con la titulación adecuada para poder gestionar y educar de la manera correcta el campamento.

Además, cuentan con un entorno de naturaleza privilegiado donde poder disfrutar de las actividades deportivas y de aventura que tienen preparadas



Os adelanto que el precio ronda los 1.050 euros la quincena e incluye todos estos beneficios:

   (Fotos: web Talking Point)

Podéis informaros en www.campamentosdeingles.es y sobre todo, ¡contarnos vuestra experiencia!

CAMPAMENTOS GOURMETS: Como bien sabéis ahora está en auge eso de que nuestros hijos se pongan el delantal y nos deleiten con cualquier suculento manjar ( eso sí, que nos dejen recogida la cocina por favor) y parte de sana culpa la tienen programas como el archiconocido Master Chef Junior.

Así que si, papás y mamás ya podéis apuntar a vuestros expertos culinarios a los campamentos Master Chef.

La verdad es que tienen una pinta estupenda y lo mejor de todo es que los hay por toda España! Cádiz, Burgos, Valencia, Ourense, Girona...

Disfrutando de un entorno natural privilegiado al mismo tiempo que aprenden a cocinar de una forma divertida.

Os dejo el enlace para que podáis informaros. En él aparecen precios, actividades y fecha. No os lo perdáis! http://www.campamentosmasterchef.com/


Y vosotros, ¿qué planes tenéis este verano?

Un mes, un cuento. ¿Juegas con nosotros?

miércoles, 25 de mayo de 2016

Tenía muchísimas ganas de hablaros de este pequeño reto que nos hemos propuesto mi hijo y yo, y que si queréis podéis animaros a hacerlo.

Es cierto que los cuentos deben formar parte de los niños casi casi desde que nacen. Primero con los cuentos coloridos y sensoriales que hacen despertar sus sentidos y agudizan en especial la vista, y más adelante con aquellos que empiezan a contar historias y avivan su imaginación.

El caso es que aunque siempre le ha gustado mucho ojearlos hasta ahora no nos lo habíamos tomado muy en serio. Le dejaba experimentar, tocar, jugar con ellos, pero ahora que ya tiene dos años y medio y ha comenzado a crear sus propias historias es el momento de presentarle 'oficialmente' los libros.

Hace unos meses, una amiga me propuso hacer un juego didáctico, atractivo y divertido. Era una cadena de libros que si se seguía correctamente, por un libro enviado se recibían treinta y seis. Me pareció una idea genial y una manera de fomentar la lectura. El problema no tardó en llegar. Para poder completar la cadena se necesitan seis comprometidas mamás dispuestas a continuarla. Imposible. No pude encontrar nada mas que a una mami que de inmediato se animó, así que me dio mucha pena, pero no pude participar.

Así que hace un mes, pensando, decidí crear mi propio juego con mi hijo y motivarle a saber apreciar los libros.

Era 23 de abril, Día del Libro, y pensé ¿Qué mejor fecha que esta para comenzar?

'Acordamos' que el veintitrés de cada mes le compraría un cuento (mi hijo es el primero, por lo cual su mini biblioteca aún está en proceso de expansión) He de decir que no es estrictamente necesario comprarlo, pueden heredarlo, o cogerlo prestado de la Biblioteca (si, en mayúsculas, porque para mi es un lugar sagrado)

El libro elegido será el libro del mes. Aquel que leeremos cada noche antes de dormir o simplemente cuando le apetezca. Haremos juegos relacionados con el libro y el último día del mes, será él quien me lo 'lea'* a mi.
*Quien dice leer, quiere decir chapurrear.

Muchas veces los pequeños se obsesionan con un cuento y les cuesta abrir su mente a nuevas aventuras, de este modo, también fomentamos la diversidad temática.

Pues bien, como os digo, tan sólo llevamos dos meses y el juego está siendo ¡Todo un éxito!

El primer cuento elegido fue uno que tenía muchas ganas de regalárselo y que estoy convencida de que muchos conocéis: ¿A qué sabe la luna? (Michael Grejniec, Kalandraka)



Mi hijo es un apasionado (no me digáis por qué) de la luna. Sueña con llegar algún día a ella. Dice que come fruta y verdura para alcanzarla (cosa que se agradece) así que cuando vio el libro,no se lo pensó ni un segundo.

El segundo libro también fue amor a primera vista. El lobo forma parte de mi familia, y estoy segura de que de la vuestra también. Para bien o para mal es su personaje favorito. El libro de El Buen Lobito (Nadia Shireen) trata de desmitificar la maldad del animal, ¿Creéis que lo conseguirá? ¡Sorpresa!



La verdad es que me apasiona verle involucrado en la historia y cuando deja volar su imaginación aportando sus ocurrencias que siempre consiguen sacarme una sonrisa.

Leer no es aburrido. Leer te da la capacidad de ser quien quieras ser. Meterte en los personajes, fantasear con finales felices y comiendo perdices. Leer aporta sabiduría y también ayuda en la ortografía. Leer es divertido y los padres tenemos la obligación de transimirles ese sentimiento a nuestros pequeños para que puedan disfrutar a tope de todo lo bueno que les pueden aportar.

Y vosotros, ¿Tenéis algún truco para ayudarles a adentrarse en los libros?

Y los 9 meses llegaron a su fin

miércoles, 18 de mayo de 2016

Como no podía ser de otra manera, os merecíais que el post fuese un poco el resumen del programa 9 meses con Samanta.

No os podéis imaginar las mujeres que me han dicho que seguían con lupa este 'documental'. Y es que este tipo de programas, nos encantan. Nos emocionamos y tratamos de ponernos en la piel de quien informa, en este caso de Samanta.

Hoy era el último de los tres capítulos, que siendo sincera, se ha hecho corto. Hoy por fin, se convertiría en madre. Como ya sabéis, paralelamente narra historias relacionadas con la paternidad. 
Se perfilaba intenso. 
Una pareja salmantina había optado por la gestación subrogada tras varios abortos. Ucrania había sido el país elegido, por la accesibilidad y sobre todo por la diferencia económica con respecto a otros países como Estados Unidos. Pero lo más llamativo no era el método de gestación, si no el empeño de la futura mamá en dar el pecho a su bebé. De tener ese 'vínculo' tan estereotipado desde que un bebé nace.
Soy consciente de que muchas no pensaréis como yo. Y lo respeto, pero necesito decirlo. Si, estereotipado. Una madre no es mas madre por parir que por adoptar, por tener un parto vaginal que por cesárea, por dar el pecho que por dar el biberón. ¡Dejémonos de tonterías, por favor! Ese vinculo del que las nuevas modas hablan se crea con el paso del tiempo, por el amor, los valores, el respeto, que unos padres puedan dar.
Viendo a esta mamá me sentí contenta por ella, por verle feliz. Pero en el fondo me planteaba si la sociedad en parte tiene la culpa de que sintamos la obsesión de amamantar, de parir con el máximo dolor posible, sin epidural, sin puntos, o lo que ahora llaman un parto respetado. Yo parí por cesárea y repetiría una y mil veces, porque el resultado fue el mismo, soy madre.
Y ella también tuvo a su pequeño Daniel.

Por otro lado, la periodista nos mostrló cómo se podía ser madre después de los cincuenta. Una mamá soltera, enfermera de profesión, jamás había renunciado al sueño de ser madre. Gracias a la ciencia, llegó Antonio. Te puede parecer mejor o peor, pero dijo algo muy sensato, y es que ella disfruta el segundo. Cada momento con su hijo es único e irrepetible y es cierto que aunque por edad puede ser su abuela, no hay que pensar en el mañana porque nadie sabe lo que nos depara el futuro, tengas la edad que tengas.

La tercera historia quizá es un poco mas complicado de entender. Una madre irlandesa perdió a su bebé a las 32 semanas de gestación. Sólo ponerse en su pellejo sobrecoge. Sin embargo, había encontrado su particular refugio en un bebé reborn, que para quien no lo sepa es un muñeco con apariencia de recién nacido. ¿Quiénes somos para juzgar? Ella superó de alguna manera el revés tan grande que le había dado la vida, y quitado un trozo de su corazón. Ahora estaba preparada para continuar.

El programa ha sido muy comentado y criticado en muchos blogs. Hace poco leía un comentario que decía algo como...'no nos va a venir a enseñar cómo se es madre' (refiriéndose a Samanta) obviamente no, pero sinceramente creo que de una manera súper natural ( a veces en exceso) nos ha mostrado las inquietudes, inseguridades y miedos de una mamá novata.

Si algo tengo que criticar es que ya que ella ha pasado por un proceso de fertilidad, hubiese estado genial que profundizase en el tema. Consideró que habría sido una buena forma de ayudar a muchas parejas. Se ha dejado muchas cosas en el tintero que podrían haber sido muy interesantes.
Pero como entre madres nos encanta criticar...Pues ya se sabe, alguna que otra crítica recibirá (se acostumbrará, desde que se es madre una se convierte en el centro de las críticas, así, sin esperarlo)

Y llegó el día, o los días, porque la pobre Samanta se tiró horas y horas hasta que por fin sus pequeños asomaron la cabecita. Entre lágrimas e incredulidad lógica, la periodista y su pareja se convertían en padres. Papás de dos preciosos bebés a quienes llamaron Violeta y Damiá. Bienvenidos al mundo y enhorabuena  a los recién estrenados en el mundo de la paternidad.

Y a vosotros, ¿Qué os ha parecido el programa?

    Foto: fotogramas


Cólicos del lactante. Como tratarlos de manera natural

miércoles, 11 de mayo de 2016

Muchos sabéis a la perfección (por desgracia por supuesto) de qué estoy hablando.

Noches enteras sin dormir, días que se alargan, llantos y más llantos sin saber de dónde proceden. Son los famosos y conocidos, cólicos del lactante.

Una fiel lectora y amiga me pidió que hablase de los bronquio fisios. ¿Os suena la palabra? ¿Sabéis qué es? Pues próximamente lo trataremos, porque me pareció muy interesante. Pero tanto para hablar de los bronquio fisios como de los cólicos del lactante, necesitaba de los consejos de un profesional y no me lo pensé ni un segundo.

Al instante me vino a la mente una genial fisioterapeuta y también amiga, Vanesa Vázquez, propietaria de la Clínica Portofisios de Alcorcón y especializada en diversos tratamientos en bebés. Era la persona idónea y de la que me fío al cien por cien para obtener información.

Así que, encantada de poder participar en Llámamemamá, me concedió una pequeña, pero completa entrevista.


Llámamemamá: Cuando llega un bebé a la consulta por cólicos, ¿Cuáles son los principales  síntomas que presenta?

Vanesa Vázquez: El principal síntoma es el llanto continuo. Suelen tener la tripita muy dura, regurgitación e incluso hipo continuado.

Llámamemamá: ¿Cómo es el tratamiento que realizas? 

Vanesa Vázquez: Lo primero que quiero decir es que trabajo sin llanto, sin dolor. No me gusta que los bebés estén molestos. Si un bebé llora durante la sesión, se tensa y es más complicado tratarle.

Antes de realizar el tratamiento, advierto a los padres que le traigan comido/a, puesto que durante la sesión al ir liberando los gases el bebé y estar más cómodo les entra más hambre.
Les realizamos osteopatía visceral, vamos liberando la tensión en la tripita, y el bebe la mayoría de las veces se queda dormido. Relajo el diafragma mediante el bombeo del mismo ya que viene muy bien para prevenir y controlar los reflujos.

Después le miramos a nivel de osteopatía craneal. Observo que los huesos del cráneo estén perfectos, para que haya un correcto movimiento del Líquido cefaloraquídeo (LCR) fluido, miramos la posición y vemos si hay algún hueso que vaya más lento y corregimos. Observamos la cabecita, y miramos  si el lagrimal esta obstruido y trato de relajar la membrana.
Durante el tratamiento suelo trabajar con pelota de Pilates.

    Vanesa realizando una de sus sesiones anticólicos en Portofisios 

    El tratamiento visceral ayuda a la expulsión de gases y aumenta el apetito del bebé




Llámamemamá: ¿Cuántas sesiones recomiendas?

Vanesa Vázquez: En realidad con una o dos sesiones es suficiente. Tengo padres que me han traído a sus pequeños porque en otros centros han requerido más de cinco. Pero depende también de si los cólicos son recientes o lleva tiempo padeciéndolos.
La duración de la sesión ronda la hora u hora y cuarto.
Siempre trato de explicar a los papás cómo realizar cada día movimientos para relajar al bebé.


Llámamemamá: ¿Qué consejos darías para poder prevenir los cólicos?

Vanesa Vázquez:  Mi consejo es sencillo, sacar siempre los gases después de cada toma. Si el bebé consigue expulsarlos se reduce muchísimo la posibilidad de sufrir cólicos. Mucha paciencia, tranquilidad y ponerse en manos de profesionales que puedan orientarles.


Desde Llámamemamá quiero dar las gracias a Vanesa por compartir con nosotros su experiencia y por dedicarnos un ratito de su preciado tiempo. Si queréis concertar una cita o contactar con Vanesa, podéis hacerlo en la web www.portofisios.es o en el teléfono 916121015.

Recordad el nombre de Vanesa porque nos acompañará en más de un post: Matroyoga, abdominales hipopresivos tras el parto... ¡No os lo podéis perder!

    Portofisios Alcorcón

Mamá, quiero un perro

miércoles, 27 de abril de 2016

Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, y no lo dudó en absoluto (Dios me libre). De pequeña me pasé años repitiendo una y otra vez: Mamá quiero un perro...
Mamá quiero un perro...
Mamá quiero un perro...

Y mi madre siempre respondía: Cuando tengas tu propia casa, tendrás lo que te de la gana. 

Así, sin piedad. Mis amigas tenían sus propias mascotas y yo veía cómo mi sueño de tener un perro, se esfumaba año tras año.

El caso es que ahora reconozco que me daba miedo. Me dan miedo, creo que casi todos los animales. En especial, las aves.

El caso es que mi hijo adora los animales, y más concretamente, los perros. Lleva días diciéndonos que quiere uno. Sé que muchos me animareis a que adoptemos o compremos alguno, pero es que considero que quien tiene un animal de compañía debe amarlo y sacrificar muchas cosas por tenerlo en su vida. Cosas, de las que hoy en día no puedo prescindir.

Llamadme egoísta, pero es que no puedo sacrificar mi tiempo, porque sé que hasta que mi hijo no sea mayor, el perro será nuestra responsabilidad, y siendo sinceros, no estamos preparados.

Me encanta la gente que tiene mascota y conviven con sus bebés. Hay multitud de estudios que demuestran los beneficios de tener animales en los niños.
Desde que nacen, crecen conscientes de la responsabilidad de cuidarles, mimarles y amar la naturaleza. Siento envidia sana, y me gustaría pensar de la misma manera.

Como muchos sabéis, mi hermano tiene Síndrome de Down, y desde que era muy pequeño le recomendaron la presencia de un can en casa. (Mis padres hicieron caso omiso) pero lo que sí recuerdo es la raza que les aconsejaron, y os sorprenderá. Rottweiler.

Aunque parezca mentira, por su tamaño, se trata de una raza calmada, obediente, segura de sí misma. Cualidades que sin duda mejorarían el autoestima del pequeño.



Pero, repito que un perro necesita cuidados, tiempo, dinero. No se puede tener por el mero hecho de querer una mascota, porque los que los tenéis, sabréis que se convierten en un miembro más de la familia, con sus defectos y sus virtudes. 

Los animales pueden aportar responsabilidad y fomentar el sentido del respeto por los demás y por el medio. Eso, me gusta.

De verdad siento no desearlo tanto como  mi hijo, porque sus ojos brillan cuando les ve y no puede por menos que jugar, acariciarles y darles amor. Un amor, que es más que sincero y real. Un amor incondicional. Como el que le ofrece a su genial amiga y compañera de aventuras Irís. 

Iris es la perrita de su tita Noe. Ambos se quieren y se odian a partes iguales. Corren, juegan y me temo que en algunas ocasiones hasta comparten comida, en especial gusanitos que les encanta. Así que de momento Iris es su mascota.

Cuál es vuestra experiencia con animales? Os animáis? Nosotros creo que empezaremos por un pez :)

   Foto: Petit Manuel e Iris


   

El viajar es un placer...

miércoles, 20 de abril de 2016

Ya sabéis que la semana pasada no hubo post como cada jueves y el motivo no fue otro que encontrarme 'out of home' o lo que es lo mismo, fuera de casa.

Lo cierto es que preferí esperar a la vuelta para poder contaros todo con más detalle. 

Siempre he pensado que los viajes en pareja son súper recomendables. Creo que de vez en cuando poder compartir momentos a solas hace reavivar la llama que por el día a día y la rutina, los hijos y demás problemas cotidianos puede resentirse.
Es como una segunda luna de miel.

También debemos tener en cuenta que pasar veinticuatro horas sin separarse de tu marido o de tu mujer no siempre es la mejor terapia, ya que obviamente habrá momentos de discusión, pero también sin duda, muchos momentos de experimentación y de sentirte de nuevo una pareja, y no sólo simples padres.

No es necesario hacer un viaje largo ni muchos días, incluso con un fin de semana de vez en cuando puede ser una muy buena terapia matrimonial.

El caso es que hace unos meses, nos tiramos a la piscina y previa aprobación de los abuelos, que serían quienes cuidarían durante esos días de nuestro Petit, decidimos embarcarnos rumbo a tierras americanas.

Era un viaje que teníamos pendiente y que nos ilusionaba bastante. Después de visitar Australia el año pasado, teníamos la espina de la Costa Oeste.

En un primer momento nos planteamos la idea de llevarnos al pequeño. Pero eran nueve horas de diferencia horaria, catorce horas y media de vuelos, varios aviones y apenas iba a recordar absolutamente nada de aquello. Así que bueno, decidimos que sería un viaje de dos.

SKYPE se ha convertido en compañía indispensable de nuestras aventuras. Así que nos las ingeniamos coordinando horarios para poder verle. A veces nos saludaba y se iba enseguida, pero a nosotros nos alegraba el día sin duda.

Aún no lo he dicho, pero nuestro viaje comenzó en San Francisco. Tenía unas ganas tremendas de conocer la ciudad y aunque el viaje se hizo pesado pudimos aprovechar el día de llegada. El puente Bay, Pier 39, las increíbles cuestas que predominan calle si y calle también, el Golden Gate por supuesto, el barrio chino, little Italy, la imponente cárcel de Alcatraz, y un lugar que me encantó fue el Golden Gate Park. La gente patinaba libremente, charlaban entre ellos y disfrutaban de un domingo cualquiera.
Sin embargo, he de confesar que la ciudad me decepcionó un poco. Demasiada mendicidad y barrios complicados, que pese a que no te molestaban, daba una imagen un tanto rara. Las calles principales olían bastante mal y a mi parecer, estaban muy sucias.
Pero con todo y con eso, la gente siempre nos ha acogido a las mil maravillas y eso se agradece cuando estás a ocho mil kilómetros de casa.





Después nos alquilamos un coche y comenzamos nuestra verdadera aventura  por la costa. Recorriendo playas tan increíbles y perfectas como las de Él Carmel, donde la arena blanca cegaba mis ojos y donde podías sentirte libre mirando el inmenso océano.


Casi habíamos terminado el día y llegábamos a Los Ángeles. De pequeña, yo que era muy peliculera soñaba con pisar el paseo de la fama y recorrer Beverly Hills como una estrella de Hollywood. Y lo hice. Bueno, más o menos. Paseé pero pude notar lo descuidado que estaba todo, sólo las estrellas estaban limpias y relucientes al llegar al teatro Dolby.



Después de unos días viviendo en la Meca del cine, nos dirigimos hacia la ciudad que nunca duerme. El lugar donde se respira vicio, fiesta y juego. Las luces y los espectáculos invadían mi mente y por momentos me sobrepasaban. Era como si mis ojos no dieran más de sí y mi cerebro necesitase un minuto de relax, pero alucinamos. Al menos hay que ir una vez en la vida y poder decir eso de 'lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas'


Y poco a poco nuestro viaje iba llegando a su fin. Aunque echábamos mucho de menos a nuestro pequeño, aprovechamos al máximo cada segundo, cada momento y cada experiencia. A nuestro regreso nos encontramos el mejor regalo del mundo, su sonrisa, sus besos, sus abrazos nos demostraban lo mucho que nos quería y que nos había extrañado.

El día de mañana espero que mi hijo aprecie la importancia de conocer otras culturas, de vivir este tipo de experiencias que sin duda enriquecen, que valore los idiomas como instrumento que le abra la puerta a otros países.
Viajar siempre es sano y hacerlo en pareja o en familia es sin duda una genial aventura.

Y a vosotros, os gusta viajar?







Autismo, aquel gran desconocido

miércoles, 6 de abril de 2016

Cuando estamos embarazadas o simplemente cuando tenemos pensamientos de ser madres, nos imaginamos a nuestros hijos sanos, guapos, simpáticos, buenos.

No nos engañemos, todas y todos tenemos esa concepción de hijos perfectos.

Mi hermano tiene Síndrome de Down, pero este es otro tema. Lo que quería contar es que cuando él nació llevaba la 'marca' Down representada en su rostro. No cabía duda alguna. 
Sin embargo, el autismo, es una de esas enfermedades que van haciendo acto de presencia a medida que aumenta el crecimiento del pequeño.
No siempre es sencillo reconocerlo y lo que es más complicado aún, aceptarlo.

Con la hiperactividad, por ejemplo, ocurre algo similar. 
El autismo es un trastorno neurólogico, más común de lo que nos imaginamos 1 de cada 42 niños varones puede ser autista. Y digo varones, porque los chicos tienen mayor posibilidad de serlo que las chicas.

Los expertos aseguran que el autismo puede ser certificado a los tres años de edad, aunque lo cierto es que los avances médicos hacen que sea posible detectarlo desde los seis meses de vida.

Y cómo puedo saber si mi hijo es autista?

Lo primero, no nos alarmemos. Si buceamos por internet podremos ver que hay muchos síntomas que nuestros hijos pueden tener, pero que no implica que lo sean.

Por ejemplo, las personas con autismo repiten en exceso comportamientos. Además se ve afectada la capacidad de comunicación e interacción con los demás.
Tienen gran dificultad en mirar a los ojos a las personas con las que hablan y en muchas ocasiones aparecen los aspavientos con los brazos sin motivo alguno.

Según la Confederación de Autismo de España, existen claros síntomas de que algo no va bien en el desarrollo del niño.

Hacia los doce meses:

- No balbucea
- Es incapaz de hacer movimiento con las manos, como saludar.
- No reconoce su nombre y no reacciona cuando le llaman 
- No se interesa por juegos básicos de la edad, como canciones, cucú tras...

Entre los doce y los dieciocho meses:

- Es incapaz de crear frases de dos palabras.
- Le cuesta mantener la mirada ocular con su interlocutor ( lo hablado anteriormente)
- No participa en juegos de grupo y siempre prefiere estar solo.

Hoy en día, muchos especialistas en Atención Temprana visitan centros educativos para poder anticiparse a este tipo de dificultades en el desarrollo y alertar a las familias para que puedan comenzar a ayudar al pequeño.

Yo como madre, sé que puede ser complicado hacerte a la idea de que algo no va bien, pero tenemos un sexto sentido, que debemos usar para prevenir y para estimular y no para ralentizar el diagnóstico.

Existen libros de ayuda y orientación que explican de una manera real y clara cómo se puede salir adelante. Con paciencia y mucho amor, con unión y sobre todo dejándoles vivir a su manera.



(Editorial Alfaguara: El día de Manuel) Manuel es un niño con autismo y nos muestra de una manera curiosa su especial visión de la vida.



La ilusión de la primera vez

miércoles, 30 de marzo de 2016

Tenía preparado otro post que lo publicaré la semana que viene y que seguro os va a encantar, pero es que acabo de revivir algo tan bonito, que necesitaba transmitíroslo.

Hace apenas unos minutos que he llegado a casa. Venía de ver a una vecina y amiga que se encuentra en su quinto mes de embarazo y hablando, conseguía  teletransportarme a ese momento en el que yo estaba de veinte semanas y revoloteaban dudas y más dudas sobre mi cabeza.

Tenía tanta emoción, y en sus ojos he podido ver esa ilusión, esas ganas de hacerlo bien y de no fallar, ¿Os acordáis?

Tengo que aprender a cocinar - me decía preocupada. ¡A cocinar!! La de cosas que se te llegan a pasar por la cabeza cuando sientes que tu vida está a unos meses de dar un vuelco.

Reconozco, y a ella también se lo decía, que me encanta hablar, contar mi experiencia y por supuesto si en algo puede ayudar mi humilde opinión, me siento reconfortada.

Quise esto y al final no lo usé. ¿Tenía que haber comprado esto o lo otro? ¿Hubiese cambiado algo o no? Son cuestiones que cuando pasa el tiempo te das cuenta de que somos animales por naturaleza, que en cuanto somos madres nos nace ese poderío innato de saber qué es lo mejor para nuestro pequeño y que lo único que necesita un bebé es el amor y la protección de sus padres, lo demás es totalmente prescindible. 

Pero como es obvio, también queremos colmarle de cositas nuevas, ropita, artilugios que probablemente nunca usemos pero que los compramos con todo el amor del mundo. Por eso yo le decía, compra lo que te apetezca, porque es tu momento.

Pero uno de mis consejos es, intentar ser prácticos y no volvernos locos. Hay cosas que no son cien por cien necesarias y que quizá terminen ocupando sitio en cualquier trastero o armario. Hay que simplificar. 

Todos los cambios que ella está viviendo, sobre todo físicos, los entiendo a la perfección, y también los recuerdo. Sobre todo el cansancio al final del día, que era mi alerta para que no me olvidase que un pequeñín me acompañaba las veinticuatro horas.

Estar embarazada sin duda, y pese a todos esos cambios, es el mejor estado para una mujer. Eso sí el embarazo se desarrolla con normalidad, por supuesto. Además, algo que a mi me pasó y que mi amiga estaba experimentando, es la sensación de vitalidad, de sentirte plena. Me sentía tan feliz que creo que eso se reflejaba en mi cara cada día.

Compartir esas vivencias tan especiales con ella me ha alegrado. Creo que llegar a casa y ver corretear a tu pequeño, ponerle la merienda, llevarle al parque, verle reír de felicidad son esas pequeñas grandes cosas, que con el tiempo te das cuenta de que es lo que verdaderamente importa en la vida, nada mas y nada menos, que disfrutar.

¿Recordáis esos primeros sentimientos? ¿Qué dudas tuvisteis que luego os disteis cuenta de que no eran tan graves?


Foto: Google.es




Feliz Día del padre, en especial para ti

miércoles, 16 de marzo de 2016

Este post va dedicado a todos los papás, en especial a uno de ellos, que lucha cada día por reencontrarse con su pequeño.

Dicen que el amor de madre es inigualable. Que una madre sabe en cada momento lo que siente su hijo, porque ella también lo siente. Ella le lleva nueve meses, o mejor dicho, cuarenta semanas en su interior y ese vínculo indescriptible les une desde el minuto uno.

Pero nadie se acuerda del buen padre. Aquel que te apoya, comprende y me atrevo a decir, aguanta, durante todo el embarazo. El que mira embelesado a esa futura mamá que deja caer su baba frente a la primera ecografía.
Aquel que pese a sus temores decide entrar al paritorio y hacer lo que puede y lo que le dejan, con valentía y emoción.

Aquel que torpemente intenta coger entre sus manos esa nueva vida que acaba de llegar para desordenar cualquier sentimiento.

Aquel que te acaricia porque sabe que estás agotada y que te premia diciéndote lo buena madre que eres.

Aquel que se considera secundario e intenta no pisar tu papel y dejarte respirar.

Pero también se lo dedicamos a aquel que por las mañanas combina el rojo de la chaqueta con el verde del pantalón.

A aquel que a un grado bajo cero decide cambiar de ropa a su hijo en el parque (este es mi marido, una historia larga que contar...)

A aquel que es incapaz de desenredar el pelo de las pequeñas, pero que les da besos tan grandes que les hace sentir princesas.

A aquel que no da una jugando al fútbol , pero intenta coordinar sus piernas para jugar en el parque como el mejor.

A aquel que le da chuches a escondidas de la madre, y el que se tira sin vergüenza por cualquier tobogán que se cruce.

A aquel padre que se pasa meses ahorrando y privándose de caprichos para poder llevar a sus hijas a Disneyland.

A aquel padre que sufre por no poder ir al festival de Navidad, que se lamenta por no poder conciliar.

A aquel padre que cocina espinacas con bechamel y que lleva a su hijo al fútbol sintiéndose orgulloso de cada progreso.

A todos aquellos maridos, novios, amigos y papás solteros que se esfuerzan por demostrar al mundo que ellos también pueden y que si buscamos igualdad, empecemos por darles los mismos derechos que a las madres, y no sólo las mismas obligaciones.

Pero en especial hoy me acuerdo de ti. No diré tu nombre, ni quién eres. No necesito hacerlo, porque si lees este humilde post te darás cuenta que formas parte de ese grupo de buenos padres que viven por y para sus hijos. Cuando este mundo sea más justo, cuando la Justicia empiece a funcionar como debe, te darás cuenta de que la vida pone a cada uno en su sitio.
Aunque no lo creas te admiro. Admiro todo lo que estás sufriendo en silencio y todo lo que ansias que el día tan esperado, por fin llegue.
Quizá no tengas ningún regalo el Día del Padre, pero sí de algo te sirve quiero decirte que el mejor regalo es saber que todos los que te queremos, te apoyamos y creemos en ti, nunca te dejaremos. Feliz día del Padre, porque te lo mereces y porque algún día verás que él también lo siente así.

Por todo esto y mucho más FELICIDADES PAPÁS!


La importancia de la amistad

miércoles, 9 de marzo de 2016

La verdad es que esta es una reflexión que con los años he ido, digamos, moldeando.

Me explico. En la vida pasamos por diferentes etapas. Esas etapas nos marcan, nos dejan huella. A veces crees que la amistad es algo grande y hay día en los que tu mente intenta convencerse de que la amistad verdadera, la de corazón y sin condición, no existe.

Llamadme radical, pero es tal y como pienso. Estoy convencida de que también vosotros sabéis de lo que hablo.

El caso es que para que entendáis el porqué de mi post, empezaré desde el principio.

Como muchos y muchas sabéis, estos días se abren las puertas de todos los colegios españoles para elegir el que será, el ideal para nuestros pequeños.

He tenido la oportunidad de volver a mi infancia, entrando en mi cole, de la mano de mi hijo. Los recuerdos se apoderaban de mi, y en el fondo me parecía que no hacía tanto tiempo que había salido a la 'verdadera vida'.

Y en mi cabeza comenzaron a surgir nombres, caras, momentos...Entre esas paredes y ese patio forjé la persona que hoy en día soy. Para bien y para mal allí había vivido los mejores años, y sobre todo, las primeras amistades. Algunas de ellas perduran en el tiempo y tengo un recuerdo tan bonito que sólo deseo que mi hijo pueda llegar a tener ese mismo sentimiento el día de mañana. El colegio es la primera piedra para construir un futuro.

Tras el colegio llega la universidad. Un lugar donde conoces gente con las mismas inquietudes que tú, motivación y sobre todo madurez. Cuatro años llenos de aventuras que han dejado amistades, de esas que aunque no te veas a menudo siempre están para lo que necesites.

Parece una bobada, pero creo de corazón que los verdaderos amigos se forjan durante el período escolar y universitario.

Hoy tengo una sensación extraña. Tomar esta decisión, sin duda, afectará a mi hijo en los próximos años. Su padre y yo somos conscientes de que tenemos que hacer lo mejor para él. Se nos hace mayor, y según crece, con él crece también la experiencia, la autonomía y sobre todo la educación.

Y vosotros, tenéis buenos recuerdos y buenos amigos de vuestra etapa escolar?

    Foto: Google.es

La sociedad cada vez soporta menos a los niños

miércoles, 2 de marzo de 2016

No pensaba hacer un post sobre este tema, de hecho tenía otro preparado, pero en mis manos ha caído el siguiente artículo:http://www.elperiodico.com/es/entre-todos/participacion/sociedad-cada-vez-soporta-menos-los-ninos-pequenos-58617

Creo que el título lo dice todo: La sociedad cada vez soporta menos a los niños.
Y ridículo me parece, porque precisamente TODOS hemos sido niños y muchos tendremos en un futuro y nos acordaremos de este tipo de ignorantes comentarios.

Entiendo que cuando estás en otra etapa  todo lo que no va contigo, te molesta. Entiendo que vivimos estresados hasta por respirar, que es imposible encontrar silencio en nuestra sociedad, pero, ¿A qué punto hemos llegado?

Viajar con niños no es tarea fácil, ni ir al súper con ellos y que les de la inesperada y temida rabieta. Cualquier situación que implique no dedicar el 100% a tu hijo y que él te reclame se convierte en misión imposible, y más si esto ocurre en plena vía pública, donde miles de ojos criticones murmuran sobre tu actuación.

Los que aún no sois padres, quizá no lo entendáis, o simplemente lo comprendáis , pero os aseguro que cuando os toca el papel protagonista, la cosa cambia, y mucho.

Cada vez existen más lugares dónde no se admiten niños. No es que me parezca mal que haya, por ejemplo, hoteles sólo para adultos, pero si es verdad que me da pena pensar que al fin y al cabo son el futuro y excluirlos considero, es un error.

Nosotros cuando no éramos papás íbamos a hoteles familiares. No somos amantes de los niños, pero reconozco que aportaban alegría y vitalidad.

Pero más allá de que se tenga la posibilidad de elegir, existe una palabra clave, apta en la mayor parte de las situaciones vitales: Educación.

Por desgracia, muchos adultos carecen de educación y respeto. Es cierto, que muchas veces los niños corren, gritan, lloran y puede ser molesto, pero para eso, los padres somos responsables de controlar la situación. Obviamente si los padres no hacen nada al respecto, nos vemos en la obligación de quejarnos, pero no creo que haya sido el caso.

Lo que entiendo que aquí pasaba es que se prejuzgó a unos padres y también a unos niños por el mero hecho de serlo, y eso, molesta y mucho.

Vivamos y dejemos vivir que bastante complicado es ser padre como para encima ser criticado. Lo mejor de todo, es que probablemente, el día de mañana serán los que se quejaban quienes viajen con sus hijos y sea entonces cuando entiendan cómo se han podido sentir estos padres que lo único que pretendían era viajar, al igual que ellos.


Foto: Google.es

Commons Attribution 4.0 International license.

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