Después de casi un mes de pensar, buscar, reservar, cancelar, y volver a pensar ¡Nos hemos decidido!
En un lugar de Almería, de cuyo nombre... Ahora en serio, al final, después de mucho debatir, ¡Lo tenemos!
¿A vosotros os pasa lo mismo? Quien me conoce, sabe que todos los años se convierten en una odisea de intrépida búsqueda de destino. Este, con el pequeño, aún más.
Decidimos que avión no. Pensamos que de momento probaríamos por la costa de la Península donde hay playas buenísimas.
Queríamos sol, por lo cual descartamos el paraíso del norte, aquel que sólo por su gastronomía y gente te conquista, pero que el agua...lo del agua es otro cantar.
Teníamos claro que buscábamos algo a pie de playa. Como ya dije en otro post, me veía con la sombrilla, el carro, las toallas, la bolsa, la piscina, el flotador, y 'debajo' de todo ese guirigay, mi hijo.
Así que comenzamos a descartar todo aquello que se encontrase a más de 300 metros de la playa.
Y después de hacer la primera criba pensamos: ¿Hotel o apartamento?
Barajamos todas las ventajas e inconvenientes de ambas:
Apartamento
Ventajas: La estancia es mucho más amplia, libertad en la cocina, una nevera con un congelador muy útil para purés y lo mejor de todo es que los horarios los marcas tú.
Desventajas: Al final no desconectas de las labores del hogar. Preparar comidas, hacer la compra, limpiar, recoger... En ocasiones no dispones de piscina y eso para muchas personas puede ser un handicap.
Hotel
Ventajas: Te olvidas por completo de la casa. Comida preparada y habitación recogida en cuanto subes de la playa. La mayoría se encuentran cerca del mar y del paseo marítimo. Para los más peques, destacar la animación infantil.
Desventajas: No dejas de estar en una habitación. Con bebés, la cosa se complica a la hora de las comidas. Cargar provisiones de purés preparados y potitos. Para las que sólo dais teta, esto no es ningún problema para vosotras, el alimento, por suerte, lo lleváis allá donde vais.
Total, que una vez sopesado pros y contras nos decidimos por el hotel. Buscábamos una bonita playa, con poco viento, sin demasiado calor, y no estoy cien por cien segura de haberlo conseguido, pero de lo que no me cabe ninguna duda es de que todo, no se puede.
Una vez contratado hotel (menudo peso nos hemos quitado, ufff...) llegan los preparativos. Reconozco que sólo pensar en lo que va a disfrutar mi pequeño con su primer chapuzón playero, me emociono. Hace poco, en casa de una prima, descubrió el césped y ¡Vaya cómo se lo pasó! Lo miraba, lo arrancaba, lo acariciaba, así que me muero de ganas de ver si le gustará la piscina o la playa.
Cual madre loca por esas primeras vacaciones en familia, me dirigí a una conocidísima tienda de 'Toys' y procedí a recorrer el pasillo de piscinas, colchonetas, juguetes acuáticos y demás cachibaches veraniegos. Me decanté por unas piscina (aquí os la muestro) en forma de abeja (os habréis dado cuenta de que la relación de mi hijo con las abejas es muy estrecha) que tiene un parasol, perfecto para esos días donde Lorenzo aprieta con ganas. Además, y asesorada por las 'Súper mamis' no dudé en añadir a mi carrito ese genial flotador que estoy segura hará las delicias de mi pequeño. El rey de la pisci, sin lugar a dudas.
Tened en cuenta, si decidís hotel, que no sea uno de esos tan modernos que ya no aceptan niños. Suena fuerte, ¿Verdad? Pues en nuestra búsqueda encontramos varios, que decepción, aunque lo cierto es que puede llegar a ser comprensible.
Hay hoteles que ofrecen cunas gratuitas para bebés. Quizá prefiráis llevar la vuestra, pero es bueno saberlo ya que muchas veces evita ocupar ese hueco en el coche, que sin duda, es imprescindible.
La mayoría de los hoteles disponen de piscina para niños y servicio de animación. Viajar en familia supone buscar alternativas para todos. Desde pasar un buen rato en el hotel, a incluso actividades acuáticas para los mayores, o si es posible, compartirlas con los pequeños.
De lo que estamos seguros es que de las primeras vacaciones en familia siempre nos acordaremos. Cada descubrimiento, cada nueva aventura en la arena, en el mar, en la piscina supone observar cómo conocen el mundo, como son felices con esas pequeñas cosas, que a veces los adultos dejamos pasar desapercibidas.
Y vosotros, ¿Ya sabéis cómo vais a pasar vuestras vacaciones?
Hola bombon !!! Vacaciones yo este año nada pero si esta claro que con un bebé la cosa se complica pero uff tus prolimeras vacaciones con el es lo mas bonito del mundo y su carita viendo cosas nuevas para el debe ser lo mas grande
ResponderEliminarLos mios ya son un poquito más mayores y cuando hemos salido los 4 ha sido a hotel con TODO HECHO, porque si no... No son vacaciones. Pero cuando el mayor era aún más chiqui cogíamos apartamento, x la comodidad de una habitación. Disfrutad!
ResponderEliminarhola.
ResponderEliminarpara nosotros tambien es una movida lo de las vacaciones.
al final este año nos hemos decidido por un aparthotel que para nosotros son la suma de las ventajas del hotel y del apartamento juntas.
te lo hacen todo como en un hotel y tienes la libertad de horarios que tendrias en un apartamento. de momento le vemos solo ventajas, ya veremos cuando volvamos a casa y hagamos balance...
Yo prefiero los Departamentos temporarios en Rosario, ya que hopedarse en hoteles suele terminar por salir mas costoso. De alguna manera nos obliga a salir para no estar en una habitación de 4 por 4
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